El estudio indicó que hubo maltrato, revictimización y la criminalización por parte de las autoridades mexicanas
Los denunciantes coincidieron que su condición de pobreza, así como el ser indígenas y campesinos, dio pie a actos de discriminación
Padres y familiares de los 43 estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa, Guerrero, han sufrido maltrato por parte de las autoridades mexicanas, las cuales incluso han querido comprarlos por su condición socioeconómica, así lo dio a conocer el informe titulado Yo sólo quería que amaneciera. Impactos psicosociales del Caso Ayotzinapa.
La investigación fue presentada este miércoles por las organizaciones de la sociedad civil Fundar, Centro de Análisis e Investigación; el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez; el Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan y Serapaz, y difundida por el portal Aristegui Noticias.
A través del informe que recoge los testimonios de padres y familiares de los estudiantes desaparecidos, se pone en evidencia el trato e intento de manipulación que las autoridades del gobierno de México ejercieron para tratar de archivar el caso.
“Hay desprecio por nosotros, hay promesas falsas […], lo que hemos visto es actitud negativa de desprecio, de señalar ‘eso merecen, eso quieren, y además se dedican a eso, vándalos, delincuentes’ […] Hay una campaña de desprestigio a los estudiantes, que pone en contra. Eso para nosotros pues no vemos una atención adecuada, al contrario, cada día se señala, criminaliza”, señaló uno de los testimonios.
Los denunciantes coincidieron que por su condición de pobreza, así como el ser indígenas y campesinos, dio pie a actos de discriminación, la cual fomentó el maltrato, la revictimización y la criminalización sistemática, con el objetivo de que su lucha se desgate y se aisle.
“Para que nos dé la espalda la ciudadanía. Para que ya dejemos las marchas, los mítines. El gobierno no se ha tocado el corazón para lastimarnos desde un principio. Les ha valido madre. No les importa el dolor. Si nos dan información, no les importa el dolor que nos está causando como padres de familia… Están cubriendo sus mentiras entre ellos, están cubriendo, yo creo que esconden algo, algo de donde están nuestros hijos”, apuntó otro.
Otros relatos aseguran que a los pocos meses de la desaparición de los normalistas les ofrecieron cantidades significativas de dinero, sin embargo, en el contexto de impunidad en que se encuentra el caso, los padres y madres manifestaron que aceptar los supuestos apoyos sería como vender a sus hijos.
“Llegaron ahí a la casa, dos hombres y una señorita, ofreció dinero, 2 millones ofreció, que aceptáramos ese dinero para la búsqueda de nuestro hijo. Pero nosotros dijimos: “No vamos a aceptar el dinero del Gobierno porque va a decir después que ya no tenemos derechos a reclamar”. No quisimos recibir ese dinero, aunque ellos estuvieran insistiendo, porque ese dinero del Gobierno, va decir: “¿Por qué reclaman si ya están pagados ustedes?”. Por eso no quisimos recibir y otras muchas mentiras”, relató otro testimonio.
El informe también evidenció que madres y padres de los estudiantes desaparecidos enfrentan un proceso de “duelo congelado”, pues no saben si sus hijos están vivos o muertos, así como profundas consecuencias en todos los ámbitos de su vida.
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