El joven aseguró que el día de los hechos no se encontraba “ni remotamente cerca” de CU
Destacó que las acusaciones en su contra pueden causarle daños, e incluso teme por la integridad de él y de su familia
Uno de los 18 alumnos expulsados de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) aseguró que no tuvo nada que ver con los hechos violentos en Ciudad Universitaria.
Se trata de Fernando “N”, de la Faculta de Estudios Superiores Acatlán, quien afirma que no se “encontraba ni remotamente cerca” de Rectoría el día en que un grupo porril agredió a alumnos del Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH) Azcapotzalco.
En entrevista con Carmen Aristegui, el joven relató que el pasado lunes, al terminar sus clases en la Facultad, alrededor de las 13:00 horas, sus amigos lo llevaron en automóvil hasta su domicilio, a donde llegó alrededor de las 14:15 horas.
Detalló que a eso de las 15 horas comió en su casa en compañía de sus familiares, y que sólo salió un momento a un local cercano para imprimir unas tareas.
Fernando explico que se enteró de su expulsión por sus compañeros, en las redes sociales, y por un documento que le mandó la Máxima Casa de Estudios.
En dicho escrito lo señalaron como presunto participante de los actos violentos contra sus compañeros, y le informaron que su salida es provisional.
También le explicaron que testigos anónimos lo identificaron como parte de los agresores involucrados, por ello, y seguridad del plantel, le avisaron que sería expulsado temporalmente para “mantener el orden de los planteles”.
El joven explicó que será el director de la Facultad de Acatlán quien remita este viernes el caso al Tribunal Universitario, para que sea llamado y presente pruebas pará ratificar o no su expulsión.
Fernando aprovechó para exhortar al rector Enrique Graue a que reconsidere su postura acusatoria en su contra, ya que, dijo, él no se encontraba “ni remotamente cerca del lugar”.
Asimismo, sostuvo que no conoce a los otros 17 expulsados, ni tiene algún conocido que tengan contacto con grupos porriles.
“Me dedico únicamente a la parte escolarizada; asistir a mis clases regulares y, si a caso, un idioma, pero más allá de eso no tengo nexos con algún tipo de grupo”, sostuvo.
El joven mencionó que presentará los testimonios de su propia familia, así como de amigos que lo llevaron a su domicilio como pruebas de su inocencia.
Destacó que las acusaciones en su contra pueden causarle daños, e incluso teme por la integridad de él y de su familia.
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