Una mujer relató que vio ropa de por lo menos 8 menores
Las autoridades indagan el presunto vínculo e la policía estatal de Javier Duarte con el hallazgo de la fosa
Ropa de bebé y niños pequeños fue encontrada en la fosa clandestina que tenía los restos de por lo menos 170 personas, en Veracruz.
Madres, padres, hermanos e hijos fueron informados del hallazgo de la fosa y empezaron su travesía en los servicios periciales para ver y tocar las más de 200 prendas de vestir encontradas en el segundo cementerio clandestino más grande del estado, localizado en el puerto de Alvarado, de acuerdo con una nota de El Universal.
Algunas madres contaron que dentro de las instalaciones les fueron presentadas ropas, incluso de niños y bebés.
“Había ropa de mujeres y hombres, de gente joven la mayoría; había ropa de bebés, de niños pequeños”, dijo Silvia Ramírez al abandonar las oficinas.
Hasta ahora se desconoce si entre los cráneos hay menores de edad, pero la mujer vio prendas de al menos ocho niños y además de muchos jóvenes.
“En lo que ví (podría haber ocho niños), eran sudaderitas con gorro, pantaloncitos cortos y chanclitas”, contó.
En los siguientes días seguirá el reconocimiento de las prendas.
Mientras tanto, la Fiscalía General de Justicia de Veracruz investiga la posible participación de elementos o exelementos de la policía estatal durante el periodo del exgobernador Javier Duarte.
Se trata de una de las líneas de investigación como parte de la búsqueda de personas desaparecidas, en la cual tampoco se descarta el involucramiento del crimen organizado, de acuerdo con una nota de Animal Político.
Fueron dos los elementos que llevaron a ésta hipótesis: el hallazgo de la fosa surge como resultado del seguimiento de los casos de desaparición forzada atribuidos a la policía estatal bajo el mando de Arturo Bermúdez, en el sexenio de Duarte.
En segundo lugar, los restos tienen por lo menos dos años de antigüedad, con lo cual se presume que las inhumaciones se dieron en la administración del exgobernador priista.
En el puerto de Veracruz, está la fosa clandestina más grande de Latinoamérica con 295 cuerpos, de los cuales sólo 15 han sido identificados.
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