Ticker

6/recent/ticker-posts

Padres de los 43 normalistas viven en una gran pobreza pero no pierden la esperanza de encontrar a sus hijos

Alberto Rodríguez Guzmán. 
 
AYUTLA DE LOS LIBRES, Gro., 27 Noviembre 2016.- A dos años y dos meses de la detención-desaparición de los 43 estudiantes de la Normal Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, padres de familia ven muy lejano el día que vuelvan a ver a sus hijos con vida, aún tienen la esperanza de encontrarlos y que se haga justicia, en tanto siguen viviendo en la pobreza. 
En el caso de los padres de Felipe Rosas Epifanio, sus padres ya no pueden caminar y viajar mucho a las movilizaciones para exigir justicia y le entreguen a su hijo, por lo que el apoyo lo realiza su tía Catalina Epifanio quien se encuentra activa en el movimiento, pero en tanto los padres solo viven de lo que producen en el campo y no siempre les alcanza. 
Margarito Ramírez, padre de Carlos Iván Ramírez, entrevistado vía telefónica, dijo que es un martirio y un peregrinar por exigir justicia y a pesar de que es apoyado por sus hijos mayores para moverse a los lugares donde visitan, ya está cansado y cada día pierde fuerzas en sus pies pero no en la esperanza de encontrar al menor de sus hijos con vida. 
Quien ya perdió la fe y la esperanza es el señor Luis Francisco Arzola, papa de Luis Ángel Francisco Arzola del municipio de Cuautepec, ya que por su edad, falta de dinero, una enfermedad crónica que padece y por no contar con otros familiares, dejo de asistir a las movilizaciones, por lo que asegura que solo un milagro podría ocurrir si ve entrar a su hijo por la puerta de su casa. 
El padre de Mauricio Ortega Valerio, dijo que seguirá buscando a su hijo y se movilizara, a donde se le ofrezca una pista para encontrar a su hijo, pero aseguro que ya se siente cansado y que la falta de dinero ha provocado que por días no se alimente y la fuerza por un momento dice que se le va, pero recuerda que uno de sus hijos no está en casa y recobra la esperanza. 

Hasta el momento solo el señor Leonel Gutiérrez Cortés, padre de Aldo Gutiérrez Solano, tiene el apoyo del gobierno federal porque el joven estudiante aún se encuentra en coma, pero aseguro que en momentos se desespera a pesar del apoyo de sus hijos mayores, además de que por momentos teme que las autoridades le retiren el apoyo para mantener a su hijo hospitalizado.