Ticker

6/recent/ticker-posts

Gobierno estatal abandonó a siete policías en el cuartel “Puerto del Gallo”; no tienen municiones, ni vehículos

El Siglo. 

CHILPANCINGO, Gro., 01 Septiembre 2016.- Policías estatales denunciaron que fueron abandonados por autoridades del gobierno del estado a siete policías en el cuartel “Puerto del Gallo”, ubicado en la Sierra de Heliodoro Castillo (Tlacotepec) donde hace unos días tres se sus compañeros fueron masacrados a balazos en una emboscada perpetrada por un grupo armado.
Además del abandono, los siete policías estatales no tienen municiones, unidades motrices y prácticamente son vulnerables a cualquier ataque, por lo que responsabilizan a sus mandos policiacos de lo que les pueda pasar.
Aseguraron también que los que resultaron heridos en la emboscada ocurrida el pasado 23 de agosto se están atendiendo con sus recursos propios, pues no han tenido algún respaldo por parte del gobierno del estado y que también se encuentran en dicho cuartel.
A nueve días que se diera la emboscada donde perdieron la vida tres policías del estado en la sierra de Heliodoro Castillo (Tlacotepec), policías estatales alzaron la voz y piden de manera urgente el apoyo del gobierno del estado, pues a sus mandos no les pueden pedir nada, ya que los castigan.
Los policías revelaron que cuando se dio la emboscada cada elemento llevaba 100 cartuchos, los cuales se los acabaron en el enfrentamiento que se dio con el grupo armado.
Apuntaron, que solicitaron más municiones, pero sus mandos, les dijeron que no era posible que se los hubieran acabado los 100 cartuchos y que seguramente se los habían robado.
Comentaron que al siguiente día de la emboscada, varios elementos policiacos de inmediato pidieron sus vacaciones y otros estaban heridos, por lo que sólo siete fueron dejados en el cuartel “Puerto del Gallo”.

Ante esta situación que prevalece en el cuartel policiaco allá en la sierra, mandaron un llamado urgente a las autoridades del gobierno del estado, donde piden más municiones, patrullas y más policías, y hacen responsables a sus mandos de lo que les pueda llegar a pasar.