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En los actos vandálicos de los normalistas en Ciudad Judicial de Iguala, destruyeron archivos del caso de los 43 desaparecidos

Flore Ramsés Hernández. 

CHILPANCINGO, Gro., 23 Septiembre 2016.- Tras las acciones vandálicas por parte de normalistas en Ciudad Judicial en Iguala el magistrado presidente del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), Robespierre Robles Hurtado, entrevistado dijo que se encuentran evaluando los daños que provocaron que archivos y expedientes del caso fueran quemados, lo que es un hecho lamentable.
Tras iniciar con las investigaciones sobre los malos actos de los estudiantes no se tienen reporte de agresión hacia algún trabajador del lugar y que de acuerdo a la información preliminar “Se realizaron destrozos al mobiliario, al edificio, a los sistemas tecnológicos, las computadoras, y quemaron archivos de expedientes”, destacó.
“Algo que en lo personal me dolió mucho, es que destrozaron el Centro de Convivencia Familiar, que es un área de apoyo a la familia”, dijo el magistrado, quien añadió que dio instrucciones para que de manera inmediata se realice una evaluación e inventario de daños a lo material y a los expedientes, por lo que se suspendieron labores hasta tener un reporte completo.
Robles Hurtado, agrego que se comprometió a reparar en lo posible y en el menor tiempo posible los daños causados por los normalistas y que estos hechos en la Ciudad de Iguala agrava más la estabilidad social “En lo personal me sumo al dolor y al esfuerzo de solución, hemos atendido a los padres de familia de los jóvenes normalistas desaparecidos y estamos abiertos al diálogo”.
Aseguro que se han resuelto todas sus peticiones  a cabalidad, que existe evidencia de ello,  pero recalco que es lamentable la destrucción de inmuebles o servicios que son para la atención de los ciudadanos.

Además dijo que “Se encuentran los archivos de las causas penales locales relativas a los casos relacionados a la tragedia de los 43; quemarlos aleja la posibilidad de justicia y entorpece las investigaciones, no sólo en este particular, sino de todos los ciudadanos que ahí tenían sus expedientes y que hoy están destruidos”.