Alberto
Solís Loeza. 
COYUCA
DE BENÍTEZ, Gro., 28 Junio 2016.- Se han
cumplido ya 21 años de aquel trágico 28 de junio de 1995, cuando 17 campesinos
de varias comunidades de la sierra de Coyuca de Benítez y de Atoyac, fueron
masacrados por fuerzas de seguridad pública del gobierno del estado.
Este
martes se conmemoraron los primeros 21
años de impunidad, denunciaron los organizadores del acto luctuoso de la
masacre de los 17 campesinos en el vado
de Aguas Blancas, personas que fueron baleadas por elementos de la policía estatal antes policía motorizada.
Con
una marcha que partió desde la comunidad de Aguas Blancas, hasta culminar en el vado, donde se encuentra
el mausoleo de los campesinos que fueron masacrados por autoridades del estado
cuando se dirigían a la ciudad cafetera de Atoyac de Álvarez; para demandar más apoyos y fertilizante, cuando
fueron sorprendidos por policías
estatales en este punto, donde fueron
muertos a balazos.
En
este acto marcharon alrededor de 15 organizaciones de los diferentes municipios
del estado; entre ellas la Organización
Campesina de la Sierra del Sur (OCSS)
Frente Francisco Villa, la preparatoria popular Lucio Cabañas Barrientos,
madres de los estudiantes desaparecidos
de la escuela normal Rural Isidro Burgos y estudiantes de la misma.
También
participaron opositores a la presa la Parota, Tita Radilla Martínez,
vicepresidenta de la AFADEM, ente otras
organizaciones de la ciudad de México que estuvieron presentes gritando
consignas en contra del gobierno, tanto estatal como federal y demandaron el esclarecimiento
de los asesinatos de los lideres caídos en estos últimos años.
En
su mensaje algunos dirigentes pidieron más unidad entre las organizaciones
sociales, pidieron no desfallecer y seguir en la lucha cueste lo que cueste;
sobre todo para seguir exigiendo justicia por este artero crimen de estado.
En
el mausoleo depositaron una ofrenda floral a los caídos; los dirigentes de las
diferentes organizaciones fueron pasando uno por uno a hacer uso de la palabra,
por lo que demandaron estar más unidos para seguir en su lucha.
Poco
más de 500 integrantes iniciaron la actividad desde las 10:30 horas y durante
los mensajes de los participantes, convocaron a la unidad de las organizaciones
sociales ya que la división solo favorece al gobierno, recriminaron que a 21 años de la masacre no
se haya castigado a los responsables y el caso continúe en la impunidad.
La
dirigente de la Organización Campesina de la Sierra del Sur (OCSS) Norma Mesino,
expuso que siguen demandando justicia a 21 años de la masacre y declaró su
solidaridad a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE),
además de continuar una lucha juntos para poder echar abajo la Reforma Educativa.
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