Berenice
Reyes/IRZA.
Fotos: Códice 21
CHILPANCINGO,
Gro., 20 Junio 2016.- En un enésimo enfrentamiento registrado este lunes,
policías antimotines estatales lanzaron bombas de gas lacrimógeno contra
maestros integrados en la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación
en Guerrero (CETEG), en tanto que éstos respondieron con piedras, en el intento
de los mentores por introducirse a la Subsecretaría de Finanzas de la
Secretaría de Educación en Guerrero (SEG).
Antes
de la confrontación, los mentores ya habían ingresado a la oficina particular
del secretario de Educación, José Luis González de la Vega Otero, donde
rompieron cristales y destruyeron computadoras y mobiliario, en la colonia
Universal.
Unos
300 maestros cetegistas del grupo encabezado por Ramos Reyes Guerrero marchó
por las calles de la capital para repudiar el desalojo efectuado por las
policías federal y estatal oaxaqueña a los bloqueos que mantenía la
Coordinadora Nacional de los Trabajadores de la Educación (CNTE) en la
carretera federal de Nochixtlán, Oaxaca, que el domingo arrojó un saldo de seis
personas muertas, aun cuando otras fuentes afirman que las personas que
perdieron la vida son 8, además de una centena de heridos.
La
marcha partió de las instalaciones de la CETEG, en la avenida Rufo Figueroa, en
donde también mantienen un campamento, y avanzó sin contratiempos por Ciudad
Universitaria, al grito de “fuera Peña Nieto, fuera Nuño”.
Al
frente, con banderas rojas con la iniciales “CETEG”, un grupo de estudiantes de
la Normal Rural de Ayotzinapa se sumó a la marcha en la “avanzada” de los
mentores.
Una
primera parada del contingente magisterial fue sobre la lateral sur-norte del
encauzamiento del río Huacapa, en la colonia Universal, donde unos 15 presuntos
mentores con los rostros cubiertos se introdujeron al edificio alterno de la
SEG, rompiendo mobiliario, una computadora, una copiadora, una pantalla de
televisión y un anaquel, entre otros objetos.
En
escasos 10 minutos el grupo de “avanzada” realizó tal acción en el inmueble
ubicado sobre la lateral sur del paseo “Alejandro Cervantes”, en donde se
albergan oficinas de Comunicación Social, Equidad de Género, Secretaría Técnica
y Particular de la SEG.
En
tanto, la marcha siguió su rumbo y subió a la avenida Juan Ruiz de Alarcón,
donde continuaron, pasando frente a la Escuela “Primer Congreso de Anáhuac”,
avanzó escasas dos calles más, cuando de nueva cuenta el grupo de la “avanzada”
se desvió de la manifestación y bajó a la colonia Universal.
El
grupo de mentores llegó a la Subsecretaría de Finanzas de la SEG -Casa Blanca-,
primero arrojando piedras a los cristales y con un marro golpeaban la puerta de
metal para poder introducirse.
A
cinco minutos de la permanencia de los cetegistas en ese lugar se lanzó la
primera bomba de gas lacrimógeno por parte de unos 10 elementos antimotines
estatales, que daban alcance a los manifestantes por la calle Manuel Acuña.
Enseguida,
por el encauzamiento del Huacapa descendieron de dos camionetas oficiales unos
30 policías antimotines que con sus escudos se protegieron de las piedras
arrojadas por los mentores, mientras ellos lanzaban otras cuatro bombas de gas
lacrimógeno. En medio quedó un grupo de foto reporteros y reporteros que
cubrían la acción.
La
marcha continuó su paso hasta retornar al campamento cetegista, sobre la
avenida Rufo Figueroa.
Durante
la marcha, el vocero de la CETEG, Carlos Botello Barrera, repudió las acciones
emprendidas por el Gobierno Federal de Enrique Peña Nieto, a quien culpó de la
muerte de participantes en acciones de la CNTE, el domingo en Oaxaca, “quien no
sólo ha demostrado la cara perversa, represora y fascista de este gobierno,
sino que ha llevado al pueblo y al magisterio a los límites de la resistencia,
a punto de un estallido social”, dijo como parte de un comunicado de la CETEG.
“La
intención del Estado es clara, pretende desarticular la lucha organizada que de
manera certera ha realizado la CNTE en contra de la mal llamada Reforma
Educativa y que ha puesto en jaque al gobierno, quien se ha negado a escuchar
la voz del pueblo que exige el respeto a la educación gratuita y a los derechos
laborales de los docentes”, aseveró.
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