CHILPANCINGO,
Gro., 27 Noviembre 2015.- El Secretario General de Gobierno de Guerrero,
Florencio Salazar Adame, quien fue también embajador de México en Colombia,
amenazó al periodista Sergio Ocampo Arista por haber advertido que previo al
ataque contra policías comunitarios de Tixtla donde murieron cuatro personas,
“El Estado había retirado los retenes que había en los accesos a la ciudad”.
Con
una actitud intolerante y prepotente, el Secretario de Gobierno irrumpió en la
cabina de radio-universidad la mañana de este viernes 27 de noviembre, con
guardaespaldas, para tomar los micrófonos para entrar al aire y advertir al
conductor del programa de noticias que estaba lanzando una crítica al gobierno
priista que encabeza Héctor Astudillo Flores, por las jornadas violentas de los
últimos días.
Sergio
Ocampo Arista, quien dio cobertura a lo largo de varias décadas a movimientos
sociales y armados, así como las diversas represiones del Gobierno en contra de
la ciudadanía y otros problemas de carácter social; hoy corresponsal de La
Jornada Nacional, lanzó comentarios al aire en torno a la masacre de la que
fueron víctimas policías comunitarios, en Tixtla.
Sergio
había comentado al aire que sospechosamente antes de la masacre de
comunitarios, se retiraron los retenes policiacos del Estado de la carretera
hacia Tixtla, y que tal vez se trataba de una estrategia de contrainsurgencia
que Florencio Salazar habría aprendido durante su estancia en Colombia como
embajador.
De
forma casi inmediata, el Secretario de Gobierno llegó a las oficinas de
radio-universidad y entró hasta la cabina sin permiso alguno, resguardado por
varias personas armadas que forman parte de su seguridad personal.
Ya
en la cabina, Salazar Adame encaró a Ocampo Arista para “responsabilizarlo” por
cualquier cosa que le pueda pasar por los comentarios que había hecho ante
cientos de ciudadanos que escuchan su programa.
“Es
grave porque tú pones en riesgo mi vida y la de mi familia, quienes te escuchen
hablar con esa irresponsabilidad, piensan que yo estoy atrás de que se cometan
actos sangrientos contra grupos que independientemente puedan o no violar la
Ley, debieran en todo caso ser sometidos a la justicia y es por eso que vine de
inmediato a este programa”, reclamó con voz fuerte el funcionario estatal que
por esa vestidura se convierte automáticamente en un ser cuyas acciones u
omisiones son de interés público.
El
comunicador reiteró su comentario y frente al Secretario de Gobierno sostuvo
que los policías habían sido retirados de las carreteras que dan acceso a la
ciudad de Tixtla, explicando que de ahí surgía su crítica, porque casi de forma
inmediata surgió el ataque donde fueron abatidos cuatro elementos de la policía
comunitaria.
Pero
Florencio Salazar, lejos de explicar el por qué no se tiene éxito en las
políticas y estrategias de seguridad para los guerrerenses, se enfocó a
advertir una y otra vez que hacía responsable al reportero de lo que le pase a
él o a su familia, insinuando que por sus comentarios podría haber un ataque
ciudadano en su contra.
El
Secretario de Gobierno calificó a Sergio Ocampo como “irresponsable” y afirmó
que estaba personalizando la acusación, le dijo que tiene una obligación social
y acusó a los periodistas de decir y escribir “lo que se les ocurre, lo que
piensan”, creyendo que con eso cumplen con la labor de informar.
“Me
parece una irresponsabilidad, una falta de respeto y te repito, te hago
responsable de lo que me pueda suceder a mí o a mi familia”, insistió
amenazante el funcionario estatal llegando casi a los gritos.
Sergio
Ocampo se limitó a decirle que él era Secretario de Gobierno y por ende
responsable de las políticas públicas en Guerrero donde está inmerso el tema de
la seguridad, pero invitó formalmente a Florencio Salazar para que acuda a
cabina el próximo martes de nuevo, pero ahora sin irrumpir de forma prepotente
e intolerante, y sin hombres armados a su lado para debatir nuevamente el tema,
sin gritos.
Y
aprovechó para decirle que los funcionarios de este gobierno no están
acostumbrados a la crítica porque están acostumbrados a comprar periódicos y
programas de radio, y por tanto no permitían que la prensa libre lanzara
comentarios críticos con argumentos como éste caso de Tixtla y el de Chilapa
donde fueron ejecutadas varias indígenas y tampoco intervino ningún cuerpo de
seguridad.
Ocampo
Arista, ha sido arropado por ciudadanos y organizaciones sociales por su forma
sincera de hacer periodismo y no estar cooptado por el gobierno, así como no
recibir dinero de sectores políticos para modificar sus notas periodísticas o
comentarios en radio.
Sergio
es hoy uno de los comunicadores más remembrados y reconocidos en el Estado de
Guerrero y cuenta con una de las mejores trayectorias, este hecho ha causado
molestia en el gremio periodístico libre y entre sectores de la ciudadanía
quienes han lamentado la poca tolerancia de los funcionarios de Héctor
Astudillo Flores.
Zacarías
Cervantes, reportero del periódico El Sur y otro de los periodistas más
conocidos por su importante trayectoria, lanzó un comentario en redes sociales:
“Don Florencio (Salazar Adame), ¿y de lo que nos pase a los 3 millones de
guerrerenses, a quien responsabilizamos?, en este ambiente de barbarie y con
gobernantes irascibles, intolerantes, soberbios, que en vez de actuar se
victimizan. Nosotros no traemos guaruras ni camionetas blindadas del erario
público”, enfatizo.
Así,
muchos periodistas más como la agencia API han mostrado su respaldo a Sergio
Ocampo Arista, al saber las palabras amenazantes de Florencio Salazar Adame
Social Plugin