Tras
la entrega recepción de la administración del presidente interino de Cruz
Grande, Federico Piza Chona, los uniformados y trabajadores del Sindicato Único
de Servidores Públicos del Estado de Guerrero (SUSPEG), la mañana de ayer al
darse cuenta que no tenían depositado sus dos quincenas y la parte proporcional
del aguinaldo decidieron encerrar al alcalde en su oficina amenazando que no sería
liberado hasta liquidar a los servidores públicos.
Todo
inicio cuando los trabajadores reclamaron en las oficinas de finanzas al
encargado y según de manera prepotente Joaquín Mejía Carmona, les respondió que
no había dinero y que le hicieran como quisieran por lo que los preventivos
decidieron llevarlo a la parte de abajo del edificio donde se encuentran las
celdas donde mantienen a todos los detenidos.
Después
de dos horas de discusión con el alcalde interino, les prometió que a las 15:00
horas todos los policías y empleados tendrían su dinero en sus cuentas, por lo
que el tesorero fue liberado alrededor de las 13:00 horas quien de inmediato se
retiró a su casa y el alcalde se esfumo, y al volver a revisar sus cuentas
dicho deposito nuca se realizó.
Las
únicas oficinas que estuvieron en función fue Telégrafos de México y un cajero
automático de banco, los policías preventivos y los empelados amenazaron que
hoy en la toma de protesta del nuevo alcalde Emisel Lisol Molina González, se
manifestaran para obligar a las nuevas autoridades proceder en contra de los
que ahora son ex funcionarios.
Aseguraron
que la alcalde entrante estuvo en complicidad para realizar la entrega
recepción y acepto que el Ayuntamiento no dejo ningún pendiente con los trabajadores
y policías.
Alberto Rodríguez Guzmán.
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