CHILPANCINGO,
Gro., 16 de abril de 2015.- Los autodefensas del Frente Unido por la Seguridad
y el Desarrollo del Estado de Guerrero (FUSDEG), fueron acusados de golpear a
un hombre hasta dejarlo en estado de coma, extorsionaron a un vendedor de
quesos proveniente del estado de Morelos y tienen “guardadas” al menos 30 armas
de uso exclusivo del Ejército, reveló un joven que estuvo detenido por este
grupo armado durante 12 días.
El
joven quien dio su testimonio para la agencia Quadratín Guerrero, fue detenido
por la policía comunitaria del FUSDEG el viernes 27 de marzo, en la colonia San
Antonio, en el municipio de Tierra Colorada (Juan R. Escudero), relató que una
noche antes defendió a una prima cuando un sujeto intento abusar de ella y fue
detenido por los comunitarios.
“La mamá de ese muchacho se fue a quejar con
los del FUSDEG y me fueron a traer a mi trabajo, yo vendo ropa, apenas había
terminado de cargar la camioneta para ir a vender, cuando llegaron por mí y me
detuvieron”, recordó.
Indicó
que estuvo encerrado 12 días en la base del FUSDEG, en Tierra Colorada, hasta
su liberación el lunes 6 de abril, previo pago de una fianza de 3 mil 500 pesos,
en los primeros tres días de encierro los policías comunitarios lo utilizaron
para realizar trabajos de herrería.
Ahí
conoció a otro detenido proveniente de Morelos, a quien sólo identificó como
Don Rubén, un empresario de 44 años dedicado a la elaboración y comercialización
de queso, “El caso del quesero era parecido al mío, él me decía que se había
peleado porque le habían tocado a sus nietas y que por eso lo habían detenido.
Además
“Cuando se dieron cuenta que era empresario y que tenía algo de dinero, los del
FUSDEG le pedían que donara dos camionetas para dejarlo en libertad, él señor
decía que no, que era mucho, que él sólo había defendido a sus nietas”, expuso
él joven.
Contó
que el quesero logró darse a la fuga por la madrugada y los del FUSDEG se
molestaron porque no pudieron extorsionarlo para dejarlo en libertad.
Los golpearon hasta
casi matarlos
Al
tercer día de su detención, el lunes 30 de marzo, el joven dejó de ser el
herrero del FUSDEG para convertirse en su sirviente.
Ese
día ocurrió un enfrentamiento en la comunidad de San Juan del Reparo, entre la
autodefensa del FUSDEG y la Policía Ciudadana de la Unión de Pueblos y
Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG).
Señalo
que ese día llegaron los del FUSDEG “muy alterados” después del enfrentamiento
y previeron que los comunitarios de la UPOEG podrían irrumpir en Tierra
Colorada, para atacarlos en su base de operaciones.
Ante
esta posibilidad, le dieron un rifle de 12 tiros y le ordenaron que subiera a la
azotea, la indicación era disparar a matar contra los comunitarios de la UPOEG,
en caso de que éstos llegaran, lo cual nunca ocurrió.
El
joven contó que después llegaron más policías comunitarios del FUSDEG con 43
detenidos, entre ellos una mujer que es hermana de un comandante de dicho grupo
a quien sólo identificó como Chimino.
“Eran
como las tres y media de la mañana cuando el comandante Chimino la golpeó, la
cacheteó en la cocina y le dijo que esas mamadas no se hacían, porque ella estaba
apoyando al otro grupo, al de la UPOEG”. Narró.
Del
resto de los detenidos, dijo que todos fueron golpeados por los integrantes del
FUSDEG, algunos de ellos hasta casi matarlos.
“Luego
que llegaron los golpearon a culatazos con las escopetas, con los rifles, a uno
le abrieron toda la frente hasta la ceja, había dos que estaban muy golpeados,
el comisario de Pochotillo y otro señor al que dejaron en estado de coma, a mí
me traían como auxiliar, me tocó llevarlos al hospital”, continuaba su relato.
“Los
golpearon feo, estaban amarrados de los pies y de las manos, les quebraron
algunos huesos, uno traía las manos y el brazo fracturado, de los dos que llevé
al hospital creo que sólo uno llegó vivo, el otro no creo que haya sobrevivido,
yo creo que se murió porque iba herido con un balazo en el costado” dijo él
joven.
Los
demás detenidos que permanecieron encerrados en la base del FUSDEG fueron
hacinados en tres cuartitos, sin cobijas, agua ni alimento, “Yo al otro día de
corazón les arrimé agua, pero los del FUSDEG me regañaban, los detenidos pedían
auxilio porque había muchos heridos, golpes muy feos, pedían que los atendieran
con algo, pero no les hacían caso”, lamentó.
Los 12 días que estuvo detenido por el FUSDEG,
el joven vio que este grupo de autodefensa tiene, al menos, 30 armas de uso
exclusivo del Ejército, “Tienen puro R15, cortos y largos, tienen unas ocho
UZI’s, cuernos de chivo, todas esas armas las pusieron en la oficina del
comandante Chimino, yo vi todo porque yo limpiaba el lugar”, aseguró.
Hasta
el momento se desconoce la identidad del joven testigo de los hechos la noche
del 30 de marzo y madrugada del 31, en las redes sociales el tema se ha vuelto polémico
por lo ocurrido y ahora que atrajo el caso la PGR, se esperan resultados y cada
uno de los involucrados tendrá que responder por sus acciones.
El
Silgo
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