CRUZ
GRANDE, Gro., 02 Enero 2015.- Concluyeron en la Costa Chica las jornadas
culturales de egresados de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa, Raúl Isidro Burgos,
con una exposición pictórica denominada “43 rostros, 43 nombres”, así como
jornadas culturales para todo tipo de público, para dar fin a un mes de
trabajos en el municipio de Tixtla, Guerrero.
En
la región visitaron los municipios de Ometepec, San Luis Acatlán, Marquelia,
Tecoanapa, Cruz Grande y Ayutla, informó el egresado de la normal rural, Carlos
Sánchez, quien detallo que también visitaron Tlapa de Comonfort, Chilpancingo, Cuajinicuilapa,
así como los estados de San Luis Potosí, Querétaro, Estado de México y Jalisco,
por mencionar algunos.
Respecto
a la exposición donde se exhiben los 43 rostros de los estudiantes
desaparecidos la noche del 26 de septiembre cuando fueron atacados por policías
municipales de Iguala y Cocula, señalo que se debe principalmente a un plan de
trabajo que se realizó desde hace un mes con artistas egresados del Instituto
Nacional de las Bellas Artes (INBA), quienes se sumaron al sentir de los
padres.
Recordó
que se realizó una convocatoria por parte de la coordinadora de egresados de la
Normal de Ayotzinapa, encabezada por el profesor egresado Joel Amateco, donde
participaron más de una docena de artistas, mismos que realizaron las pinturas
para darlas a conocer a nivel estatal y nacional, pues todos conocen la historia
de los hechos en contra de los estudiantes, pero no conocían sus rostros.
“Es
darles ese rostro que mucha gente no conoce, pues solo conocen los hechos, en
esta elaboración de pinturas participo más de una docena de compañeros que acudieron
al llamado y en la mayoría de los cuadros plasmaron una comunicación con cada
uno de los rostros de los 43 jóvenes desaparecidos”, destacó Carlos Sánchez.
Con
respecto a la exigencia de la presentación con vida de los 43 normalistas, el
ex normalista señalo que el gobierno no ha hecho nada, nada que signifique un avance
para localizar a los estudiantes desaparecidos, señalo que solo le ha dado una política
de mediatización, contención a la conformidad y apostándole al desgaste del
movimiento.
“Para
nosotros los compañeros normalistas desparecidos son nuestros hermanos menores,
ellos se estaban formando en una institución de mucho reconocimiento histórico social,
político y no nada más a nivel local, yo creo que el gobierno y la gente sabe
que este suceso es conocido a nivel mundial y el sentir de esta pérdida no solo
es de Tixtla, o de Ayotzinapa, sino es un sentir es universal”, remarcó el
profesor.
Agrego
que se han tocado todas las fibras internacionales y que cree mucha gente tiene
el mismo sentir al saber de la pérdida de 43 alumnos de la normal y que por ello
existe mucha indignación, mucha rabia y que solo queda difundir el tema para
que no se vuelva a repetir un 26 de septiembre, un 2 de octubre, un Charco, o un
Aguas Blancas.
Alberto Rodríguez Guzmán.
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