Con todas estas modificaciones se prevé cambiar 15 artículos de la Ley de Hidrocarburos
La futura administración también buscará “reintegrar” una representación (sindical) de los trabajadores que detenta el STPRM
El próximo gobierno de México. que será encabezado por Andrés Manuel López Obrador, ya planea diversas acciones para escatar al sector energético.
Entre ellas, destaca revalorar el papel de Pemex al dotarlo de plena autonomía presupuestal y de gestión, para lo cual se le sacaría del presupuesto de egresos.
Además, se le volvería a asignar un mandato de seguridad energética, responsabilidad social y creación de valor, “dentro de un contrato-plan con el Estado”.
También se tiene contemplado reintegrar a la petrolera estatal en una sola empresa, así como modificar su gobierno corporativo, con el cual pueda ejercer su autonomía.
La futura administración también buscará “reintegrar” una representación (sindical) de los trabajadores, que ahora detenta el Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM), liderado por Carlos Romero Deschamps.
Dicha representación sería electa mediante el voto universal, secreto y directo de los mismos sindicalizados, informó El Universal.
Asimismo, se planea “regular las exportaciones de los productores privados, a fin de que su producción sirva para apoyar el abasto nacional”.
Con todas estas modificaciones se prevé cambiar 15 artículos de la Ley de Hidrocarburos: 4, 6, 12, 13, 14, 15, 16, 17, 20, 21, 28, 42, 95, 100 y 117.
El gobierno del tabasqueño también tiene entre sus objetivos: recuperar el proyecto de la refinería de Tula, Hidalgo; posponer las alianzas (farmouts) de Pemex hasta que su esquema se modifique y se inscriban en un programa estratégico de largo plazo.
Así como indemnizar a Pemex, por las inversiones hechas en todas las áreas que no retuvo tras realizarse la Ronda Cero; ampliar la inversión en exploración para obtener tasas de restitución de reservas probadas, superiores a 100 por ciento, tanto en petróleo crudo como en gas natural.
Desarrollar un esfuerzo tecnológico que tenga en cuenta la reducción de costos de producción, mejores técnicas de recuperación y aprovechamiento de los yacimientos en aguas ultra profundas.
Entre los lineamientos también se encuentra el “abandonar la Agencia Internacional de la Energía”, situación que contradice lo integración que aprobó la Junta de Gobierno de la agencia el pasado 21 de junio, y con la cual Pemex se convirtió en el miembro 30.
En su lugar, pretende explorar la posibilidad de un mayor acercamiento y mejor coordinación con la OPEP, para cuando suceda el descubrimiento de eventuales yacimientos transfronterizos, Pemex sea el operador responsable del lado mexicano.
Ante todas estas acciones, el próximo gobierno planteó, que a diferencia de pasadas administraciones, buscará “profundizar y coordinar todos los esfuerzos, hasta eliminar el robo y el mercado negro de petrolíferos”.
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