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Líder de la UPOEG lamenta el asesinato de uno de sus compañeros y pide al gobierno esclarecer el caso

Alberto Rodríguez Guzmán. 

AYUTLA DE LOS LIBRES, Gro., 29 Febrero 2016.- Bruno Plácido Valerio, promotor de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), lamento el asesinato de uno de sus compañeros quienes iniciaron el levantamiento armado civil el 5 de enero de 2013, ante los hechos del domingo, pide a las autoridades que se investigue el caso. 
El ahora promotor y ex comandante del Sistema de Seguridad y Justicia Ciudadana (SSJC), Mauro Rosario García Ayodoro, uno de los pioneros cuando los pueblos se hartaron de que no contaban con las autoridades para brindar seguridad y se vieron en la necesidad de armase para defenderse, ahora el líder principal pide justicia para sus compañeros caídos. 
Recordó la muerte de Miguel Ángel Jiménez Blanco, quien perdiera la vida de manera violenta en su pueblo de Xaltianguis y hasta el momento no se ha sabido nada sobre los avances de este caso, por eso urgió que las autoridades permitan que la policía ciudadana operar en los pueblos donde se tiene presencia, ya que ha repuntado la violencia. 
“Los compañeros que murieron ayer no portaban armas ya que habían asistido a una reunión de la organización fuera de su pueblo y como no pueden circular armados estos no pudieron defenderse del ataque que sufrieron ayer”, señalo Plácido Valerio.
Desde ayer después del ataque contra los integrantes de la UPOEG, se movilizaron los grupos de policías ciudadanos y sin importar volvieron a iniciar los operativos de búsqueda y vigilancia para llegar hasta los responsables de estos hechos y criticaron que un retén militar que se encuentra a unos metros no haya llegado al apoyo de los que ayer murieron. 

Ahora los retenes del SSJC para entrar a los pueblos son más controlados y se han desplegado más de 500 policías ciudadanos y vigilan quien entra y quién sale, señalaron que después del sepelio de Mauro Ayodoro, se montaran más grupos de vigilancia para capturar a los responsables de su muerte y amenazan con movilizarse para exigir seguridad si no quieren que ellos la brinden a los pueblos.