CHILPANCINGO,
Gro., 18 Junio 2015.- De nueva cuenta un grupo de policías municipales de la
capital del estado, protestaron en el cuartel y reanudaron el paro laboral, esto
después de que el alcalde Mario Moreno Arcos, los dejara plantados en una
reunión que ya se había programada para las 8:00 horas del jueves.
Exigen
entre sus demandas uniformes nuevos, equipo de trabajo acorde a sus necesidades
y el pago de un bono de tres mil pesos, seguro, viáticos y vales de gasolina,
así como su bonificación por el día del padre, ante la falta de atención amagaron
con quedarse en el cuartel hasta que acuda personalmente el alcalde de
Chilpancingo.
Los
uniformados después salieron y bloquearon por más de hora y media el
libramiento antiguo que conduce al municipio de Tixtla, en el bloqueo los
policías municipales exigieron la destitución del secretario de Seguridad
Pública municipal Constantino González Vargas.
Los
poco más de 80 policías volvieron a parar labores y dejaron sin vigilancia toda
la ciudad de Chilpancingo, esto como forma de protesta ante la negativa de
atender el caso el propio alcalde Mario Moreno, pero acudió al lugar de la manifestación
el Síndico, Abelardo Adame Ávila: el Secretario de Finanzas y Administración,
Jesús Manuel Urióstegui Alarcón y el regidor de Seguridad Pública Carlos Leyva
Acevedo.
Urióstegui
Alarcón, dijo que el alcalde Moreno Arcos, gestiona dinero para atender las
demandas de los policías municipales, que las unidades que se utilizan como patrullas
están debidamente aseguradas y las pólizas de seguro de vida ya están firmadas para ser entregadas a los
trabajadores.
Por
otra parte el síndico Abelardo Adame, informó que el martes próximo se hará la
entrega de uniformes a los 115 policías municipales y que el recinto municipal no
cuenta con dinero para atender sus
demandas, pero que se está gestionando un recurso para atenderlas.
Un
policía municipal dijo que no existe la mínima coordinación con el secretario
de Seguridad Pública, Constantino González, además desde que comenzaron las
movilizaciones de los uniformados han sufrido represalias de parte de los altos
mandos de esta corporación y acusaron que una patrulla la tiene en su casa el
alcalde, otra el presidente electo Marco Antonio Leyva Mena y que sólo una
unidad opera para toda la ciudad.
Despues
de las 16:00 horas de ayer los uniformados reanudaron labores de vigilancia pero
advirtieron que de no resolver sus demandas y necesidades volverán a parar
labores.
Flor
Ramsés Hernández.
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